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Raquetazos modernistas

La octava muestra del modernismo cartagenero apostó ayer por el deporte de época con el croquet y el tenis en las más que centenarias instalaciones del CT Cartagena.



El tenis tiene mucha relación con el modernismo, pues el famoso torneo inglés de Wimbledon se estrenó en 1877 y es un deporte olímpico desde 1896, es decir, en ambos casos, en plena época del modernismo. Por su parte, el croquet, considerando un pariente lejano del golf, se remonta a 1830, entrando en el mundo olímpico en la cita de París de 1900. Ambos son utilizados por la asociación cultural Modernistas de Cartagena de Levante como ejemplos de la vertiente deporte de la época que representan y por ello, en esta octava edición de su muestra, han vuelto a habilitar una jornada en torno a ellos, la cual tuvo como marco otro inmueble en consonancia, como es el Club Tenis de Cartagena, que fue levantado en la ciudad en 1907.



La jornada culminó con una animada y sabrosa comida de hermandad entre modernistas de Cartagena, de Torre Pacheco, Valencia, Soria y de otras tierras con la directiva del club de tenis, en la que no ha faltado una gran variedad de embutidos salidos de la plancha, los tradicionales michirones ('a lo kachimanero') y dulces artesanales.

El programa de la 'VIII Muestra modernista de Cartagena' continúa hoy con el inicio de las conferencias y los 'escaparates vivientes' en la sede de Hidrogea en la calle del Carmen, cuyo detalle se puede observar en la imágenes siguientes, elaboradas sobre la base del cartel de este año, obra de Eduardo Alpuente y su hija.  

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