Fotoshock: Escape alado
Estas palomas tuvieron que hacer un aterrizaje forzoso en la instalaciones del complejo deportivo del Sanchez Luengo de El Algar debido a que ya no podían con el acoso de tantos ‘pretendientes’ sobre sus alas.
La población de El Algar es muy aficionada a la colombicultura y por las tardes es habitual que se lleve a cabo sueltas de palomas, las cuales lleva un sensor y varios palomos. Los dueños, desde tierra, las van siguiendo con walkie-talkie desde sus vehículos, que forman notables caravanes.
Los jueces que les siguen desde tierra van puntuando a los palomos que más se arriman a la paloma y los distinguen por sus colores y luego al final de la tarde, cuando termina, se llevan a cabo las puntuaciones.
En El Algar existe esa gran tradición y una fuerte asociación de colombicultura, que durante muchas semanas realizan las sueltas para preparar su participación en los diferentes campeonatos regionales y nacionales.
