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Mesa redonda de Memoria Histórica

La asociación de Cartagena organiza la charla-coloquio ‘Contradicción monarquía-democracia en nuestra Constitución’ con los expertos Pedro Martía Egea, Piluca Sánchez y José Pascual Ortuño. Será hoy, a las 19 horas, en el salón de Agrónomos de la UPCT del paseo de Alfonso XIII.



COMUNICADO DE MEMORIA HISTÓRICA DE CARTAGENA firmado por su presidente, Bernardo Sánchez  

“Felipe VI: 10 años bastan

El próximo mes de junio se cumplirán diez años del inicio del reinado de Felipe VI. La abdicación sirvió para apartar como rey emérito a Juan Carlos I, cuando se empezaba a conocer la punta del iceberg de su carrusel de corrupción. Las personas de la Comisión promotora de las marchas por la República nos declaramos defensoras de la democracia como el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo. Creemos firmemente en la igualdad ante la ley de todas las personas. Creemos que aquellas personas que ejercen responsabilidades en el Estado deben ser responsables ante la soberanía popular.

Esta concepción democrática es incompatible con el principio de irresponsabilidad e inviolabilidad recogida en la Constitución Española. La monarquía representa la corrupción sistemática no como un caso aislado, sino como la característica que ha definido la relación histórica de la Casa de los Borbones con el Estado.

La monarquía, asimismo, simboliza la institución patriarcal por excelencia en la que se transmite el poder por herencia y donde se constitucionaliza la prevalencia del varón sobre la mujer.

La monarquía como principio choca con la democracia porque niega la capacidad del pueblo para dirigir el Estado. El poder monárquico no solo es el rey, es también esa minoría privilegiada que manda sin presentarse a las elecciones, que se atrinchera en el aparato del Estado y en los consejos de administración de grandes empresas y no acepta la soberanía popular. La contradicción, así, está entre monarquía y democracia.

Por todo ello, el próximo 16 de junio saldremos a las calles “a pasearnos a cuerpo, que ya es hora”, para anunciar que ante la decadencia de la monarquía la democracia abrirá paso a la república del siglo XXI.


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